Se trata de una institución cultural y administrativa creada en 1931. Sus fondos documentales ocupan más de ocho kilómetros de estantería, y fueron producidos principalmente por instituciones y organismos públicos de Huesca y su provincia en el ejercicio de sus funciones.
También conserva la mayor parte del fondo del Archivo del Monasterio de Sigena, que fue entregado en depósito tras la destrucción del Monasterio en 1936.
También conserva fondos privados de personas o familias notables vinculadas al Alto Aragón. Entre los fondos personales destaca el del polígrafo Joaquín Costa que incluye su extensa correspondencia. Entre los fondos familiares pueden citarse los de Casa Bardají -importante familia infanzona que se extiende por Sobrarbe y Ribagorza en los siglos medievales y modernos-, el fondo de la familia Azara (ss. XIX-XX) o el de la familia Pano de Monzón, de la que saldrán personalidades tan destacadas como el historiador Mariano de Pano y Ruata o su hermano Joaquín, un importante ingeniero de finales del siglo XIX.