El templo, construido en piedra sillar de magnífico despiece, presenta planta de tipo basilical, de tres naves paralelas de tres tramos cada una; éstas van encabezadas por ábsides semicirculares, siendo el central de mayores dimensiones que los laterales; presenta dos capillas y la torre adosadas a la nave norte.
Los ábsides van cubiertos por bóveda de cuarto de esfera sobre una faja de bisel ajedrezado y las naves con bóvedas de medio cañón sobre arcos fajones que arrancan de imposta sencilla que corre sobre una hilera de dientes de sierra, decoración de tradición lombarda, y apean en pilares circulares de gran potencia con grandes capiteles decorados con motivos animales, vegetales y geométricos.
De las capillas adosadas al costado norte una tiene bóveda apuntada y la otra se cubre con cúpula octogonal y linterna sobre pechinas.
Tuvo un coro alto tardogótico, con rasgos mudéjares, decorado con policromías a base de las barras de Aragón y motivos geométricos de rombos, estrellas y róleos. Fue desmontado en una de las restauraciones de la iglesia.
Al exterior presenta fábrica de sillería en la que quedaron patentes las ampliaciones posteriores, construidas en un aparejo más rústico e irregular. El tratamiento superficial de los paramentos destaca por la sobriedad imperante en todo el conjunto, reduciéndose a la apertura de los ábsides mediante pequeños vanos en arco de medio punto y doble derrame. En la fachada principal abre el acceso bajo un arco de medio punto de gran dovelaje de aristas molduradas encima de la cual se practicó un óculo. Se abrió un acceso secundario en el muro sur, seguramente la puerta original, que consta de una arquivolta de medio punto con tímpano decorado con cruces y motivos alegóricos, y la inscripción PETRUS Y MAR.
El tratamiento decorativo es muy escaso a base tan solo de canecillos de puntas de rollos, cabezas estilizadas y otros motivos ornamentales que sostienen cornisas de ajedrezado jaqués.
La torre está adosada al ángulo noroccidental del edificio. Consta de cinco cuerpos. Los dos inferiores, separados por una leve imposta, son de planta cuadrada y se elevan sobre un pequeño zócalo. El tercer cuerpo, de planta octogonal, lleva adosados en los cuatro frentes que coinciden con las esquinas del cuerpo inferior garitones de planta semicircular. Separado de ésta por una imposta, se elevó un cuarto cuerpo que abre en todos sus frentes con ventanas en arco de medio punto y acoge el cuerpo de campanas. Remata con chapitel piramidal.
La iglesia combina rasgos característicos del románico jaqués con pervivencias lombardas, según un modelo híbrido peculiar de Ribagorza que se configura en el siglo XII en torno a la fábrica de la iglesia del monasterio de Alaón.
La torre es característica de la renovación arquitectónica del siglo XVI en la franja meridional de Ribagorza, con ejemplos muy similares en Lascuarre, Laguarres, Castarlenas y Castigaleu.