Es un edificio que combina los elementos góticos con partes realizadas en estilo barroco, producto de dos fases constructivas bien diferenciadas. Consta de tres naves, con cabecera recta, flanqueada por estancias dedicadas a sacristías y espacios auxiliares; la torre se sitúa a los pies, en el lado norte del atrio.

Está construida en sillería, excepto parte de las ampliaciones barrocas, que son de ladrillo visto, como en el caso del cimborrio octogonal del crucero y las cúpulas y linternas de las naves laterales.

La puerta se sitúa al oeste, en la parte central del hastial de los pies. Es en arco escarzano rebajado sobre el que se superopone un arco de medio punto ligeramente apuntado y abocinado, con arquivoltas escalonadas recorridas por una banda, a modo de capitel corrido, de relieves en forma de cardinas. Hay una aguja piramidal coronando el arco y otras dos agujas, muy dañadas por la erosión, flanqueando el vano.

En la fachada norte, a la altura del inicio del crucero, hay otra puerta de estilo barroco, convertida actualmente en ventanal mediante una vidriera. Consta de arco mixtilíneo entre pilastras con capiteles muy erosionados, sobre los que se acomoda el vuelo de una imposta que corona el conjunto a modo de arquitrabe.

En el interior es donde fundamentalmente se manifiesta la combinación de elementos góticos y barrocos.

La nave principal está dividida en tres tramos y cubierta por bóvedas góticas de crucería estrellada, cuyos nervios apean en un entablamento barroco con un voluminoso escalonamiento de molduras, sostenido por pilastras adosadas rematadas por capiteles corintios.

Estas pilastras se encuentran adosadas a los frentes de los pilares de separación de las naves, unidos entre sí por arco formeros de medio punto.

Las naves laterales son más estrechas que la central. Están igualmente divididas en tres tramos, que se cubren mediante pequeñas cúpulas y se prolongan en capillas laterales poco profundas de planta rectangular.
El crucero está cubierto con una gran cúpula gallonada sobre pechinas, mientras que sus brazos lo hacen con bóvedas de medio cañón con lunetos.

La cabecera, fruto también de la reforma del siglo XVIII, que debió de sustituir al original ábside poligonal, está cubierta igualmente por una bóveda de medio cañón con lunetos.

Tiene coro alto a los pies, de sillería, con el frente en arco escarzano y balaustrada también de piedra. El sotocoro se cubre con bóveda de crucería, cuyos nervios apean en ménsulas cónicas decoradas con escocias y bolas.

La torre está levantada en sillería. Es de planta octogonal y cuatro cuerpos, separados por impostas. En los dos cuerpos superiores los ángulos están resaltados por columnas adosadas. En el último se abren cuatro vanos en arco de medio punto rebajado, dispuestos en lienzos alternos del octógono. Remata con un casquete bulboso, añadido en la reforma barroca.